
Mohair, sutil y ligero como tela de araña.
Al principio me sorprende la extrema delgadez del hilo, pero comienzo a tejer.
Parece magia. Hilo y filamentos delicados van entrelazándose y forman un velo de lana,
transparente, suntuoso, como ala de mosca, como tela de araña.
Será una chaqueta de noche, de adorno, especial, una sombra que me sigue
con su propio movimiento.
Prometo foto.
Sí, por favor, foto.
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